ADRIANA + NANDO

No me va a resultar nada fácil escribir un texto para esta boda. Porque son amigos y personas extraordinarias. Y eso hace que las típicas frasecillas edulcoradas que uno ve en los blogs de boda y en los sobres de azucarillos de las cafeterías, no sean dignas de ellos. Desde que nos dijeron que se casaban ya empecé a sentir ese peso extra de la responsabilidad y me decía… “Manolo, no me jodas, ese día tienes que estar a tope, inspirado y darlo todo desde el minuto uno”. Después, tal y como es un servidor, durante todo el día de la boda pensaba… “Manolo, no te estás esforzando lo suficiente, ellos son importantes para tí y tú no estás on fire…”. Típico de mí. Decidí multiplicarme, moverme y buscar como si no hubiera un mañana. Estar en todos lados, hacer mil kilómetros con mis cámaras y captarlo todo. Como si, a falta de inspiración o talento, el hecho de vaciarme fuera a ser suficiente. Acabó la boda de madrugada y nos despedimos de Adriana y Nando. No lo dije a nadie pero marché pensando que podía haber hecho más… Al día siguiente, descargué y revisé los miles de fotos y se me abrió el cielo: había magia, había todo aquello que me gusta de mi profesión y me esfuerzo siempre en buscar. Pensé de nuevo… “Manolo, esta vez sí se te ha aparecido la virgen…”. Pero no…, creo que fueron ellos, Adriana y Nando, los que lo hicieron posible. ¿Por qué? Muy fácil, porque se aman y no tienen ningún problema en demostrárselo constantemente. Yo sólo tenía que estar atento y capturarlo. Así de fácil, o de difícil. Como es esto, tan curioso, de la fotografía de bodas.

Muchas gracias a Adriana y Nando por dejarnos participar de su historia. Y gracias también por hacer que aquel día pudiéramos coincidir muchos profesionales y amigos con los que nos conocemos perfectamente y con los que siempre es un placer trabajar, como Marta de Can Riera de la Pineda, mi media naranja Neus de Cirera & Cabani, Albert de Beats & Roll o Jordi de Cal Blay y otros con los que fue la primera vez y con quienes resultó extraordinariamente fácil trabajar como fueron Marta y Eider, de PaiPai Produccions.

CAST IN ORDER OF APPEARANCE

Can Riera de la Pineda, mi amigo y second shooter Ian y yo, de Manel Tamayo Wedding Photographer, Neus de Cirera & Cabani, DJ Pedri de Beats & Roll, Vanessa y Silvia de Empordà Events, Jordi y su fantástico equipo del càtering Cal Blay, Lourdes Bahí de Flors Bahí y Marta y Eider de PaiPai Produccions,